Algunas de las cosas que hicieron que empezara el nuevo año más liviana:
- Bajar la cantidad de emails acumulados en mi bandeja de entrada -sin leer, sin contestar, sin clasificar, sin terminar de hacerles seguimiento- de 758 a 19.
- Que mi vieja me haya pedido perdón por lo de aquellas épocas, mirándome a los ojos y con el corazón abierto.
- Que mi viejo haya salido bien de la operación y esté sonriendo de nuevo, aunque no me pida perdón nunca por lo de aquellas épocas.
- Hacer las pases con la sombra del estilo de vida que me hubiera gustado tener y no tuve.
- Soltar un viejo sueño y elegir otro distinto pero más cercano.
- Humanizarme. Todo no puedo. Enfocar la vista.
Después de un año, toqué tierra firme.
Y encima el 2008 es mi año en el horóscopo chino.
domingo, 6 de enero de 2008
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario